OVALADO

Es considerado el cuadro clásico por excelencia. El que no necesita mayores correcciones. Al que se pretende de llegar de una u otra manera. No de su perímetro o línea de contorno. El rubor se trabajara a partir del cruce o intersección de las diagonales con la horizontal de línea de base de la nariz  y la proyección de la vertical que se proyecta del iris hacia abajo.  

REDONDO

Por general son rostros pequeños.  Se busca elongarlos.  Siguiendo la línea del contorno se oscurece el final de la barbilla hacia la mandíbula. El rubor muy en diagonal desde la parte alta del pómulo hasta acercarse lo máximo posible a la boca. Ver esquema

TRIANGULAR O EN CORAZÓN

Nos recuerda un triángulo invertido. La frente es ancha y pierde volumen hasta acabar en mentón estrecho. Con Polvos  oscuros se intervienen las sienes y los laterales de la frente.  Se angulan las cejas y el rubor debajo del pómulo en forma de L siguiendo las líneas planteadas por el mismo rostro..

CUADRADO

Mandíbula ancha con medidas simétricas hacia la frente. Por lo general los pómulos son salientes. Con polvos oscuros se trabajan las 4 esquinas. El rubor se aplica  en forma oblicua ascendente hacia las sienes con tonos algo más claros en el centro de intersección de la línea vertical de iris hacia abajo con la línea de la base de la nariz

EN FORMA DE PERA O TRIANGULAR INVERTIDO

Es un cuadro de mandíbulas prominentes anchas y fuertes. La armonía estribara en conseguir el equilibrio entre la frente y la mandíbula. Para ello se trabaja un tono más claro la frente y se oscurecen las esquinas junto al empate hacia las orejas. Rubor oblicuo hacia las sienes combatiendo la horizontalidad.

💜Con Amor,

Andrea Mimada👑

✨Nos veremos muy pronto con la lección No 12 “Rubor” Y ahora cuenta… ¿Cuéntanos que tal te pareció? Vamos… ¡Te leo!👇